La educación es un proceso formativo para el ser humano, la sociedad se agrupa en comunidades debidamente organizada, esto a fin de normar y reglar la convivencia y el cohabitar social. A hora bien, el ser humano es una materia altamente organizada capaz de adaptarse a los cambios y a ser receptivo a las modalidades que surgen con la evolución social; las dinámicas de avanzada nos marcan pautas o nos obliga a trazar lineamientos de transformación y con ello aprendizajes de vida y profesional.
Se necesitan montones de voluntades para aceptar los cambios, y con ello nuevos paradigmas; la educación superior es uno de los peldaños fundamentales de profesionalización del ser humano, hoy en pleno siglo xxi, la dinámica social y comunicacional nos obliga a, desarrollar herramientas que nos acerquen al intercambio de criterios y saberes a la brevedad del tiempo con el espacio. Nuestros facilitadores y participantes tenemos que incorporarnos a la vanguardia de la tecnología, tecnología que nos arropa nos muestra que a través de la misma las nuevas profesiones y las tradicionales deberán obedecer a la velocidad comunicacional de la tecnología.
El ser humano y el medio necesitan encontrarse, sincerar sus necesidades, investigar ¿cómo dar un paso al frente para mayor aprovechamiento de la ciencia y la tecnología?
La educación en estos nuevos tiempos ha de ser la práctica investigativa al servicio de la humanidad y el planeta; resaltando valores que humanicen la convivencia y nos permita hondar en la investigación para mejores resultados.
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